Este homenaje conmemora los 50 años desde que los vecinos de este municipio debieron abandonarlo antes de quedar sumergido bajo las aguas de la Presa de Almendra.
Como consecuencia de la bajada del nivel del embalse, diversos restos arquitectónicos han quedado al descubierto dejando entrever el pasado histórico de este municipio sayagués.
El pasado sábado tenía lugar la tercera y última etapa con motivo de la celebración de los 50 años de la desaparición bajo las aguas de la presa de Almendra del municipio sayagués de Argusino, actos celebrados en el entorno de la ermita de la Santa Cruz y bajo el título ‘Música y palabras para el recuerdo’. Los tres actos realizados recordaban a aquellos que tuvieron que abandonar el pueblo, una mirada al pasado, pero reivindicado el presente y el futuro de quienes forman parte de Argusino.
Como acto de apertura se descubría un monolito conmemorativo en recuerdo a la historia y a los nativos de Argusino. El cura párroco de Villar del Buey, Florentino Pérez, fue el encargado de descubrir las dos piezas de granito de grandes dimensiones extraídas durante este verano de los huertos de la zona de Pozaco (Argusino). El monolito se encuentra en el jardín anexo a la ermita de la Santa Cruz, rebautizado como ‘El jardín de los sueños’. Durante el acto, se procedió, además, a la lectura de un texto a cargo de su autor, Sergio Aguilar, titulado ‘Argusino, a dónde fueron tus campanas’, así como de la interpretación del himno creado para el pueblo.
El segundo acto tenía por título ‘La diáspora del 67’. La actriz palentina, Mercedes Herrero (premio a la mejor actriz 2017 por la Unión de Actores de la Comunidad), fue la encargada de interpretar la diáspora como el claro reflejo del pasado que condenó al pueblo de Argusino a su desaparición física. Por su parte, la periodista Carmen Ferreras ha sido la encargada de dar lectura y voz al presente y futuro del pueblo de la mano de los nativos y descendientes que luchan día a día por mantenerlo vivo en sus corazones.
‘La diáspora del 67’ ha recreado con carros los enseres que las familias se llevaron de sus hogares (cargados de tejas y diversos aperos). Además, se han reflejado los 29 destinos a los que los descendientes de Argusino fueron a parar tanto de la geografía local como nacional e internacional.
El último acto ha sido amenizado con la actuación de la Banda de Música de Zamora, para cerrar la tarde La tarde una gran chocolatada a la que se ha invitado a todos los asistentes.
Este evento coincide con el último fin de semana que las gentes de Argusino vivieron en el pueblo. De esta forma, se cierra la última etapa de grandes actividades en homenaje al 50 aniversario de la desaparición del pueblo.
A partir de este momento, el propósito de la Asociación Cultural Argusino Vive, colectivo impulsor de estos actos, será la de continuar luchando por preservar el recuerdo del pueblo y estrechar lazos entre sus descendientes.